24 de noviembre de 2007

¡Que grima!

Estoy en la oficina, es sábado por la mañana. Entra un chico y me pregunta por uno de mis jefes. le contesto que no llegará hasta pasada media hora y me contesta que ok, que se queda a esperar y se acomoda al sofá a esperar, sin hacer nada.
Y a mi me incomoda. Normalmente a la gente que viene a hablar con alguno de mis jefes y le contestas que tiene que esperar unos 10 min. la reacción es la de siempre:
- Ah! bueno pués me voy a tomar un café y vuelvo
- Ah! ok , me voy a hacer un recado y vuelvo
- etc.
Como me está poniendo nerviosa (lo escribo en vivo y en directo) llamo a mi jefe y le digo que hay una persona esperándolo. Mi jefe me contesta:
- Dile que tardaré un cuarto de hora que si quiere ir a tomar un café que vaya tranquilo.
Le comunico el mensaje de mi jefe y me contesta que no, que se queda gracias.
¡¡¡Grrrrrr!!!
Lo raro es que ni lee ningún periódico, ni revista ni nada. Parece un autómata. Si le miro me sonrie. Pobre no tiene ni idea de las ganas que tengo que desaparezca.
A ver si la rara soy yo.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí me ha pasado lo mismo alguna vez. Intentas no mirar a esa persona, convencerte de que no está ahí, pero sientes su mirada clavada, o escuchas un molesto ruidito y son sus zapatos golpeando rítmicamente contra el suelo...

Si has tenido un día malo, hasta te dan ganas de darle una mala respuesta, aunque luego te lleves la bronca de tu jefe. En esos momentos te da igual, ¿y lo a gusto que te quedas diciéndole: "¿Tío, no tienes nada mejor que hacer?". (Que conste que nunca he llegado a decirlo, pero ganas no me han faltado...).

Daniel Marcos dijo...

Bueno... en este caso creo que la rara eres tú, ¿no, crees?
El chico, al fin y al cabo, no estaba haciendo nada malo allí.

Unknown dijo...

Pues yo creo que no eres rara,un poco neuras(como yo),jajaja,pero vamos que ninguna patología importante,de momento!jajaja.
En serio,a mí me pasaría igual que a ti.La presencia de determinadas personas me molesta los pensamientos.

Anónimo dijo...

Ay, hijina, ese es el pan mío de cada dos días :-)
Me pone nerviosa saber que hay alguien esperando por el jefe durante un tiempo indefinido. Y si ni siquiera les apetece echar un vistazo al periódico o a alguna revista, peor.
Y el colmo de los colmos es que mientras esperan, te estén observando cómo trabajas. Si - como yo últimamente - tengo poco curro, me invento tareas sobre la marcha :-D

Nottinghill dijo...

es una invasión de tu espacio. A mi también me pasa. Te entiendo perfectamente.

Ingrid dijo...

Menos mal que no soy la única. Seguramente Daenyel tiene razón y un pcoc rara sí soy. Pero es que hay personas que solo con su presencia pueden llegar a ser molestos.
Gracias a todos por leerme y comentar

Anónimo dijo...

Las esfinges suelen ser misteriosas y molestas, pero no muerden. Son como una mosca dando vueltas a la cabeza, que no acabas de verla pero sabes que está ahí zumbando.

Un abrazo

Gina dijo...

Estoy de acuerdo en que el pobre no hacia nada malo, solo esperaba a tu jefe... pero también entiendo que hay personas que incomodan, solo su presencia es incomoda!!

Nottinghill, te entiendo!! Eso es lo peor, tener alguien allí esperando y tu sin nada que hacer!!!!! ufff

Anónimo dijo...

Me he reído mucho con tu historia. Y si te contara las cosas que vivo por aquí en Japón. Para tipos raros los que me encuentro yo, je, je